El presidente de RN, Carlos Larraín, no ha ocultado su deseo de que los colorines -con quienes asegura compartir una visión socialcristiana parecida, aparte de una vieja amistad con Adolfo Zaldívar- reconozcan filas en Renovación Nacional y contribuyan, junto con el pequeño "humanismo cristiano" que en 2006 apoyó a Sebastián Piñera, a darle a este abanderado de derecha un barniz de centro católico.
Sin embargo, en este propósito -que volvió a revelar el reciente domingo en El Mercurio- se enfrenta disensos internos, ya que al ofrecer cupos a quienes han salido de la falange, afecta a gente de su lado, ya sea a quienes están en cargos como a otros interesados en llenar cupos donde la derecha no está representada.
Incluso ayer en La Segunda el UDI Juan Masferrer, que sería desplazado por
El también UDI Manuel Rojas -que podría perderse ante Pedro Araya- acusó a RN de estar vendiendo la postulación de Piñera al mejor postor. Larraín hasta recibió una crítica desde su propia mesa, ya que el vicepresidente Cristián Monckeberg señaló que "es malo salir diciendo que queremos pactar con los colorines".
El punto es que los colorines -la excepción es el senador Antonio Horvath- están en dos escaños que son de la UDI y por tanto esta tienda se vería afectada.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario